Estoy en el descanso del Milan-Barça. Mira que me cuesta escribir esto, pero, ¡qué equipazo es el Barcelona!
Sin duda el mejor del mundo. Tiene al mejor entrenador, Guardiola. Para mí, la pieza fundamental del club en los últimos años. Superior al "One" Mouriño en casi todo. Si añadimos a Messi, el mejor jugador del mundo, además de Xavi e Iniesta dos jugadores que están en el siguiente nivel, entre los cinco mejores del mundo y un resto de equipo fabuloso, no queda mucho que añadir. Hasta Puyol, que me encanta, parece un buen pelotero junto a ellos. Como equipo, saben presionar, hacer las faltas en el momento oportuno, son solidarios y generosos. Y saben ser "perros", en el buen sentido, cuando es necesario. Los mejores.
Pero también veo otras cosas que "contribuyen" a que sean los mejores: un poco de suerte, siempre necesaria. Suerte incluso en las decisiones arbitrales. Incluso en el partido de hoy, que está dominando, y en el que está jugando bien.
Veamos: Penalty rigusoso a Xavi: el árbitro lo pita. Penalty igual de riguroso de Mascherano: el árbitro no lo ve.
Posiciones al límite: Cuando son del Milan siempre pita fuera de juego; cuando lo son del Barça, no.
Faltas duras del Milan: rápida tarjeta. Hoy el Barça no ha hecho cortes descarados de contraataques, otra de sus especialidades, pero cuando lo hacen, se suelen librar de la tarjeta.
Desde mi punto de vista, esta suerte ha sido habitual en los partidos importantes.
Concluyo: el Barça es el mejor equipo del momento. Espero, como madridista, que el fin de su dominio esté próximo. Ha tenido mucho mérito lo que ha hecho el Madrid en la liga los últimos años. Sin los resultados de los enfrentamientos directos contra el Barça, habría sido campeón.
Veremos lo que ocurre este año. Temo la experiencia del Barcelona. El Madrid tiene un equipo muy bueno, pero joven e inexperto y tipos que, como Pepe, Ramos y Marcelo, pierden muy rápido la cabeza ante las posibles provocaciones del rival.
Otro día hablaremos de Guardiola.
Para finalizar: bravo Ferrer, que acaba de dar dos lecciones de tenis ante Murray y Djokovic y ánimos para Nadal.
